Anfibios en la Península Ibérica
En los sistemas acuáticos temporales típicamente mediterráneos, la fauna vertebrada es poco diversa debido a los continuos ciclos de llenado y secado. Estos ciclos impiden la existencia de peces, pero se da la paradoja de que son ideales para los reptiles y los anfibios, que fueron el primer grupo de vertebrados en colonizar el medio terrestre hace más de 300 millones de años. Sin embargo, estas especies se encuentran actualmente en declive debido a la destrucción de sus hábitats, el cambio climático, la introducción de especies invasoras o la propagación de enfermedades.
Un anfibio llamado gallipato
Cuando uno escucha ese nombre, «gallipato» quizá se le venga a la cabeza un ejemplar híbrido entre gallo y pato, pero nada más lejos de la realidad.
El gallipato (Pleurodeles waltl) u ofegabous, como se le conoce popularmente, es un anfibio endémico de la Península Ibérica que habita en nuestro Parque Natural de la Sierra de Espadán y que, desgraciadamente, se encuentra en peligro de extinción.
Este vertebrado que prefiere habitar en entornos húmedos pertenece a la familia de los urodelos que, al igual que las salamandras y los tritones, tiene la peculiaridad de conservar su cola aún en edad adulta. Fijaos en la etimología: urodelos, del griego “oura” (cola) y «delos» (evidente, visible); a diferencia de las ranas y los sapos que pertenecen a la familia de los anuros, del griego “an-”(sin) y “oura” (cola).
¿Ahoga toros?
Lo más llamativo de esta especie es su nombre en valenciano, que históricamente ha dado lugar a elucubraciones varias. Así «ofegabous» literalmente ahogatoros en valenciano es como se le conoce popularmente.
Como curiosidad, un hecho que podría explicar esta denominación, el gallipato tiene la capacidad de extraer sus costillas, perforando su piel, como defensa ante los depredadores. Quizá por eso la creencia local explica que fueron muchos los toros y otras cabezas de ganado las que murieron atragantadas al beber de alguna de las charcas donde habitaba este característico anfibio.
Un tesoro a proteger
En un esfuerzo por preservar esta especie vulnerable y promover la conservación de los ecosistemas, desde el Parque Natural de la Sierra Espadán se está reintroduciendo en balsas aptas para su reproducción una de las especies más emblemáticas y declarada “vulnerable” por el Catálogo Valenciano de Especies Amenazadas de Fauna, y en regresión en algunas zonas de su área de distribución.
En concreto, el Parque Natural de la Sierra de Espadán está reintroduciendo gallipatos en espacios adecuados para su reproducción. Un proyecto que no solo protege al gallipato, sino que también contribuye a la preservación de la biodiversidad y fomenta la educación ambiental en la región.
En el Parque Natural se ha podido constatar en los últimos años la buena adaptación de este anfibio, al haberse encontrado individuos de varias generaciones en diversas balsas del área. Por este motivo, durante los siguientes meses, se continuarán con los trabajos de adecuación del hábitat de esta especie acuática, la mejora de las balsas y la prospección de puntos de agua, con el asesoramiento técnico del personal del Centro de Investigación Piscícola de El Palmar, y la colaboración del personal técnico en educación ambiental del parque natural, la asociación Interpreta Natura y el IES Santa María de Vila-real.
¡Únete a los esfuerzos de conservación en la Sierra de Espadán!
Recuerda que es vital contribuir en la preservación de la flora y fauna de nuestro entorno, con lo que respetar las áreas de estos animales silvestres y no molestarlos ni inquietarlos se hace imprescindible para que las generaciones venideras disfruten también de especies acuáticas actualmente vulnerables como el gallipato.
Encontrarás más información sobre este anfibio autóctono y las acciones para su preservación en el último boletín quatrimestral del Parque Natural de la Sierra de Espadán:
